Hoy en día, las empresas deben centrar sus estrategias en garantizar la felicidad de sus clientes y, para lograrlo, deben comprender sus deseos, necesidades y sentimientos. El campo del neuromarketing investiga cómo funciona el cerebro a lo largo del proceso de compra.
Para mejorar la eficacia de las estrategias de marketing y las campañas publicitarias, el objetivo fundamental del neuromarketing es comprender y, en la medida de lo posible, intentar cuantificar cómo responden los individuos a diversos estímulos.
Sube Agencia es una empresa de servicios de marketing que es consciente de que el servicio al cliente y la experiencia de compra son ahora prioridades absolutas. Es crucial utilizar estas herramientas para analizar el comportamiento del consumidor y orientar las decisiones de compra de los clientes.

Estrategias de neuromarketing para conquistar al consumidor
Se necesitan tres elementos esenciales para animar al consumidor:
- Los sentimientos que les provocan.
- La atención que prestan al estímulo.
- La capacidad de retención, es decir, si las estrategias de marketing o los anuncios dejan huella en la mente.
Somos seres emocionales, así que aunque seamos conscientes de nuestros deseos básicos, siempre habrá desencadenantes que hagan que nuestro cerebro trabaje más y empecemos a pensar en hacer una compra.
Aplicación del neuromarketing en la vida real
El neuromarketing examina cómo influyen en el cliente los distintos colores, relieves, etcétera, con el fin de construir un diseño de producto y una publicidad relevantes para el tipo de consumidor al que queremos impactar. Los estímulos visuales y las imágenes tienen un impacto rápido y eficaz en nuestro cerebro.
Por otro lado, los estímulos auditivos pueden ser útiles en algunas transacciones comerciales; sin embargo, no desempeñan un papel tan importante en la decisión final de compra como el estímulo visual.
Finalmente, pero no por ello menos importante, los estímulos kinestésicos como el tacto, el gusto y el olfato son cruciales para convencer a los clientes de que compren un determinado artículo. Esta estrategia utiliza degustaciones en tiendas u otros establecimientos comerciales para que los clientes experimenten, sientan e interactúen con los productos.
Otros elementos, como la iluminación, las cestas o carros de la compra con ruedas (de modo que éstas apunten hacia las estanterías) y la colocación de la mercancía son ejemplos de tácticas de neuromarketing.
